El 2021 ha sido un año de retos a nivel y caos económico en todo el mundo. El caso de Reino Unido, que se enfrenta actualmente a niveles de escases nunca antes vistos, y se proyecta que la situación empeore durante los próximos meses. Por otro lado, la FAO ha reportado incrementos de precio en productos alimenticios.
Los precios mundiales del trigo han subido un 41% con respecto al año pasado. Este incremento se ha debido a la «escasa disponibilidad de las exportaciones en medio de una fuerte demanda», según ha informado esta semana la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).
La producción mundial de cereales en 2021 está en camino de alcanzar un récord histórico de 2 800 millones de toneladas, pero esta cifra es inferior a las necesidades de consumo previstas en la temporada comercial 2021/2022, según las proyecciones de la FAO.
Los precios mundiales del trigo subieron casi un 4% en septiembre respecto a agosto. Los precios del arroz también subieron en septiembre, mientras que los del maíz aumentaron un moderado 0,3%, con una media del 38% interanual.

«Entre los principales cereales, el trigo será el centro de atención en las próximas semanas, ya que la demanda debe ser puesta a prueba frente al rápido aumento de los precios»,
Abdolreza Abbassian, economista principal de la FAO
Índice de precios de los alimentos de la FAO
El índice de precios de los productos lácteos de la FAO aumentó un 1,5% con respecto a agosto, ya que «la sólida demanda mundial de importaciones y los factores estacionales» en Europa y Oceanía «hicieron subir las cotizaciones internacionales» de todos los productos lácteos, especialmente la mantequilla.
El índice de precios de la carne de la FAO se mantuvo «prácticamente sin cambios en septiembre respecto al mes anterior» y subió un 26,3% en base anualizada.
Las cotizaciones de la carne de ovino y bovino subieron debido a la escasa oferta, mientras que las de las aves de corral y la carne de porcino «disminuyeron en medio de un amplio volumen de oferta mundial de la primera y una menor demanda de la segunda» en China y Europa.
Los precios del aceite de palma alcanzaron máximos de 10 años debido a «la fuerte demanda mundial de importaciones y la preocupación por la escasez de mano de obra migrante que afecta a la producción» en Malasia.
Los precios mundiales del aceite de colza también «se apreciaron notablemente», mientras que las cotizaciones del aceite de soja y girasol descendieron.
La producción mundial de cereales en 2021 está en camino de alcanzar un récord histórico de 2 800 millones de toneladas, pero esta cifra es inferior a las necesidades de consumo previstas en la temporada comercial 2021/2022, según las proyecciones de la FAO.
Los precios mundiales del trigo subieron casi un 4% en septiembre respecto a agosto. Los precios del arroz también subieron en septiembre, mientras que los del maíz aumentaron un moderado 0,3%, con una media del 38% interanual.
«Entre los principales cereales, el trigo será el centro de atención en las próximas semanas, ya que la demanda debe ser puesta a prueba frente al rápido aumento de los precios»,
Abdolreza Abbassian, economista principal de la FAO
Índice de precios de los alimentos de la FAO
El índice de precios de los productos lácteos de la FAO aumentó un 1,5% con respecto a agosto, ya que «la sólida demanda mundial de importaciones y los factores estacionales» en Europa y Oceanía «hicieron subir las cotizaciones internacionales» de todos los productos lácteos, especialmente la mantequilla.
El índice de precios de la carne de la FAO se mantuvo «prácticamente sin cambios en septiembre respecto al mes anterior» y subió un 26,3% en base anualizada.
Las cotizaciones de la carne de ovino y bovino subieron debido a la escasa oferta, mientras que las de las aves de corral y la carne de porcino «disminuyeron en medio de un amplio volumen de oferta mundial de la primera y una menor demanda de la segunda» en China y Europa.
Los precios del aceite de palma alcanzaron máximos de 10 años debido a «la fuerte demanda mundial de importaciones y la preocupación por la escasez de mano de obra migrante que afecta a la producción» en Malasia.
Los precios mundiales del aceite de colza también «se apreciaron notablemente», mientras que las cotizaciones del aceite de soja y girasol descendieron.