El brazo ejecutivo de la UE se prepara para iniciar el próximo mes las consultas públicas sobre el proyecto del euro digital. La Comisión Europea también preparará una nueva legislación para establecer la base jurídica de la versión digital de la moneda común europea. Se espera un borrador para 2023.
El jefe de finanzas de la UE anuncia un plan legislativo para el euro digital
La Comisión Europea (CE) tiene previsto presentar un proyecto de ley adaptado para sentar las bases jurídicas de una moneda digital en euros, según informó esta semana Politico. La legislación apoyará al Banco Central Europeo (BCE) en sus esfuerzos por elaborar la parte técnica del proyecto, que entró en su fase de investigación en octubre de 2021.
El organismo ejecutivo de Bruselas pretende presentar el proyecto de ley a principios del año que viene, pero antes quiere lanzar una consulta pública al respecto. El BCE ya lo hizo en 2020 cuando constató que los europeos estaban muy preocupados por su privacidad financiera. La CE pretende centrarse en cuestiones prácticas como la forma en que la moneda facilitará los pagos cotidianos.
Tras el informe de Político, la comisaria de servicios financieros de la UE, Mairead McGuinness, anunció el plan legislativo en una conferencia sobre fintech:
Nuestro objetivo es presentar la legislación a principios de 2023. Una consulta legislativa específica en las próximas semanas.
La Comisión Europea tendrá que coordinar el proyecto con los gobiernos y las legislaturas de los Estados miembros antes de que se convierta en ley. El BCE está realizando pruebas con el euro digital. La autoridad monetaria espera empezar a trabajar en un prototipo del CBDC a finales de 2023.
Para finalizar el proyecto, también se llevará a cabo una evaluación de impacto para determinar si el euro digital puede desestabilizar el sistema financiero. Los gobernadores de la eurozona decidirán si merece la pena acuñar una moneda virtual y el euro digital podría emitirse en 2025.
Aunque el Consejo de Gobierno del BCE tomará la decisión final, destacados miembros de la UE, como Francia y Alemania, ya han pedido al banco central del Eurosistema que redoble sus esfuerzos en esa dirección. Los responsables políticos de Bruselas y las capitales europeas temen que la eurozona se quede atrás respecto a China, Estados Unidos y Rusia, que han desarrollado sus propias monedas digitales.