Cientos de soldados podrían ser movilizados para suministrar combustible a las gasolineras que se están agotando en todo Reino Unido. Las compras de pánico y la baja de conductores, han llevado, presuntamente, a desarrollar un plan de emergencia que Boris Johnson podría considerar este lunes.

El primer ministro reunirá a altos cargos del gabinete para analizar la «Operación Escalin» después de que BP admitiera que un tercio de sus gasolineras se habían quedado sin los dos principales tipos de combustible.
Por otra parte, la Asociación de Minoristas de Gasolina (PRA), que representa a casi 5.500 puntos de venta independientes, dijo que entre el 50% y el 90% de sus miembros se habían quedado sin combustible. Y predijo que el resto no tardaría en hacerlo.
Los acontecimientos han hecho temer que el Reino Unido se enfrente a un segundo «invierno del descontento» y han alertado de que las estanterías podrían estar más vacías antes de la época decembrina. Varios miembros del gabinete de ministros se reunieron el domingo a mediodía para debatir las opciones, entre ellas la Operación Escalin.
¿De que se trata la Operación Escalin?
Se trata de un plan concebido hace años durante la planificación de un Brexit sin acuerdo. Supondría el reclutamiento de cientos de soldados para conducir una flota de reserva de 80 camiones cisterna. Se entiende que tardaría hasta tres semanas en ponerla en práctica, porque algunos de los movilizados podrían estar ya en otros despliegues y otros podrían ser reservistas.
Entre los ministros anunciaron que las empresas de combustible quedarían temporalmente excluidas de la Ley de Competencia con el fin de compartir información y optimizar el suministro. Los funcionarios dijeron que la medida facilitaría que las empresas «compartieran información, de modo que pudieran priorizar más fácilmente la entrega de combustible a las partes del país y los lugares estratégicos que más lo necesitan».
El Escalin y otras propuestas se presentarán a Johnson el lunes por la tarde, en una reunión en la que también se espera que los ministros discutan soluciones más inmediatas para tratar de influir en el comportamiento de la gente y poner fin a los actuales niveles de compras de pánico.
Diferentes puntos afectados han puesto su opinión y proyecciones sobre el asunto
Los ministros están exasperados porque creen que la verdadera magnitud de la escasez de combustible habría sido ínfima si el público actuara con normalidad, y la escasez de conductores de vehículos pesados sólo habría tenido un efecto marginal, pero los informes de los medios de comunicación han provocado colas ante las gasolineras de todo el país.
Una fuente sugirió que el alto nivel de escasez durará al menos otros cinco días, y podría prolongarse aún más si el comportamiento de la gente no cambia. La situación es un «callejón sin salida», ya que, si el gobierno interviene, podría agravar el problema.
La contundente estrategia de comunicación, consistente en insistir en que no hay escasez de combustible, pasará probablemente a instar a los ciudadanos a tener en cuenta a los demás cuando compren gasolina.
La atención también se centra en la Navidad. Kate Martin, de la Asociación de Pavos Tradicionales de Granja (TFTA), afirma que el Reino Unido podría enfrentarse a una «escasez nacional» de pavos de cara a diciembre.
La TFTA, que representa a los productores de pavos camperos de alta gama, dijo que era «100% causada por la escasez de mano de obra» debido a las normas de inmigración post-Brexit, lo que significa que «una gran cantidad» de la fuerza de trabajo ya no está disponible para nosotros para utilizar en una base de temporada».
El Consorcio Británico de Minoristas también dijo que las medidas para relajar las normas de inmigración para solucionar los problemas de la cadena de suministro eran «demasiado poco y demasiado tarde» para la Navidad.
Jim McMahon, secretario de Transportes en la sombra del Partido Laborista, afirmó que la solución del Gobierno de agilizar las pruebas de los vehículos pesados y conceder unos 5.000 visados adicionales para los conductores y otros 5.000 para los trabajadores del sector avícola «no es suficiente». Dijo que, si los ministros no hacían más, «las estanterías seguirán vacías, con los medicamentos sin entregar y la Navidad arruinada para la nación«.
Al gobierno británico se esta situando en una sombra de escasez, al parecer, no tiene final cercano según las diferentes fuentes. Estas medidas planeadas por el gabinete de Johnson pueden ser una solución de paños calientes, que no detendrán el crecimiento de la catástrofe que ya se está gestando.
La Operación Escalin, mas que una solución, parece una medida de control ante un hecho inminente, y el gobierno británico esta preparado para ello. Todas estas medidas surgieron ante la época previa al Brexit, como una medida desesperada y ahora planean usar esta medida para denotar que es posible que pierdan el control.